Agentes de la Policía Nacional de Guadalajara, que vienen trabajando de forma activa contra los daños que provocan los grafitis vandálicos, han logrado a través de sus investigaciones identificar y detener a nueve de los grafiteros vandálicos más prolíficos de la zona a los que se les atribuyen daños valorados en más de 40.000 euros.
Los daños, consistentes en realizar grafitis en vagones de trenes de cercanías, se iniciaron a principios de año, incrementándose los mismos y cobrando especial relevancia durante los meses de mayo y junio del presente año, en la estación de cercanías de Renfe de Guadalajara.
Este colectivo de jóvenes aprovechan el estacionamiento de los trenes en las estaciones para colarse en las mismas, bien por la mañana o bien por la noche, para realizar sus pintadas y dibujos.
Igualmente estos grafiteros y cuando los trenes se encuentran circulando, aprovechan las paradas en las estaciones de paso o incluso llegando a accionar el freno de emergencia del convoy, produciéndose una frenada brusca y violenta del tren fuera de las paradas establecidas, creando una gran alarma entre los pasajeros, aprovechando esa parada para realizar las pintadas en el tren.
Suelen realizar "quedadas" a través de redes sociales, para realizar pintadas grupales, como los últimos hechos ocurridos en Madrid.
Estos grupos de grafiteros, actúan como verdaderos grupos organizados, cubriéndose los rostros para dificultar su identificación, no dudando en ningún momento si fuera necesario, hacer frente a los vigilantes de seguridad o fuerzas y cuerpos de seguridad, con la máxima violencia, como así ha ocurrido en distintas ocasiones.
Este grupo de jóvenes constituye un auténtico "CREW" que mediante quedadas organizadas ha participado en multitud de actos vandálicos por todo el Corredor del Henares, llegando varios de sus integrantes a participar en los grupos que realizaron las pintadas vandálicas masivas realizadas el pasado mes de noviembre en el Metro de Madrid.
Después de realizar los grafitis, proceden a grabarlos, para luego difundirlas en internet, ya que el grafiti es una competición que busca la publicidad y reconocimiento por ver quién es el que más y mejor pinta en un lugar más difícil.
La investigación se inició en enero de 2018 a raíz de las pintadas realizadas por un grupo de jóvenes en la estación de Renfe de Guadalajara que huyeron del lugar después de agredir al vigilante de seguridad, con las propias piedras de las vías del tren, para evitar ser interceptados.
Posteriormente, en el mes de marzo, se detuvo a dos grafiteros de Barcelona y uno de Guadalajara mientras realizaban pintadas en las misma estación de trenes de Guadalajara.
Tras recibirse las denuncias por 14 delitos de daños realizados mediante grafitis vandálicos con la firma de los distintos autores, la Brigada Provincial de Información de Guadalajara se hizo cargo de la investigación, pudiendo determinar la autoría de multitud de grafitis, logrando identificar quien había detrás de cada una de las firmas, procediendo a la detención de nueve jóvenes con edades comprendidas entre los 16 y 28 años por su presunta participación en este tipo de delitos.
OTRAS PINTADAS
A los ya mencionados, hay que sumarles otros muchos daños ocasionados por los integrantes de este grupo en numerosas localizaciones de la zona, con grafitis vandálicos de gran coste económico.
En el operativo han sido intervenidos botes de pintura en spray de diferentes colores y útiles necesarios para llevar a cabo las pintadas.
La Brigada Provincial de Información continúa las investigaciones que está llevando a cabo en redes sociales acerca de este grupo, para averiguar en qué lugares se han realizado más grafitis vandálicos en otras zonas de la provincia o fuera de la misma, ya que no sólo realizan grafitis en vagones de trenes sino en fachadas de edificios, teniendo en cuenta que una vez que han sido descubiertos por la Policía, estos grupos de grafiteros suelen cambiar sus firmas, para evitar ser nuevamente identificados y detenidos.
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