Pablo Casado irrumpe en la campaña preelectoral con propuestas de programa, presentando un Decálogo para una Educación de Calidad

Propone una ley educativa que garantice la libertad de elección de las familias, que incluya una evaluación al alumno que sea vinculante en el Bachillerato, que refuerce la Alta Inspección potenciando las competencias sancionadoras frente al adoctrinamiento y que garantice la educación en castellano

El presidente del Partido Popular, Pablo Casado, ha presentado este sábado en Salamanca el decálogo de su formación para una educación que garantice la calidad en toda España.

En un acto del PP en la capital salmantina, ciudad que celebra el VIII Centenario de su Universidad, el presidente popular ha desgranado las diez grandes propuestas que son el eje de “una buena ley educativa”, en contraposición a “la contrarreforma educativa” puesta en marcha por Pedro Sánchez en apenas nueve meses de Gobierno: “Queremos una buena ley de educación que garantice la libertad de elección de las familias para elegir la educación de sus hijos, acabando con las zonas y los códigos postales”. “Apostamos por la evaluación pública para conocer el rendimiento del alumno”, ha continuado explicando sobre el segundo punto de su decálogo, “y que haya una prueba al final de cada etapa que sea vinculante en Bachillerato; garantizar también que el castellano sea lengua vehicular en toda la enseñanza -“garantizar la educación en castellano, no del castellano”, ha hecho hincapié-”.

En cuarto lugar, ha seguido enumerando, “reforzar la Alta Inspección y darle competencias sancionadoras” para evitar el adoctrinamiento; “reforzar las materias troncales, las Humanidades, recuperar la Filosofía y, al mismo tiempo, trabajar por las materias tecnológicas; apostamos por el bilingüismo en inglés, para que los jóvenes salgan preparados para competir en cualquier país del mundo; defensa de la educación concertada, especial y de la educación en el entorno rural; un MIR docente que prestigie la profesión para seleccionar a los mejores profesores; prestigiar también la Formación Profesional dual y, finalmente, impulsar la gratuidad progresiva de la educación de cero a tres años, y avanzaremos en los conciertos con el Bachillerato, para que la educación concertada también pueda llegar a la prueba de acceso a la Universidad”.

Según ha explicado Casado, este decálogo educativo forma parte “del plan de choque de 100 días” que pondrá en marcha si es elegido presidente del Gobierno, plan que también integran otras cuestiones nucleares de las propuestas que ha ido anunciando en las últimas fechas, tales como la revolución fiscal, la prisión permanente revisable, la revalorización de las pensiones o la racionalización del sistema sanitario.

“Esa es la España que quiere el PP, y lo demás son cuentos”, ha indicado Casado, que también ha garantizado que con él como presidente del Gobierno “los mejores opositarán donde quieran, sin que la lengua sea requisito excluyente, en todo caso un mérito”.

Y frente a su formación, “que es un valor seguro” de futuro -y que es además el único partido que habla de lo que a la gente le importa, haciendo así gala de la frase de Unamuno tenemos que ser más padres de nuestro porvenir que hijos de nuestro pasado -, se sitúan quienes solo hablan de lo que divide a la gente. “Las preocupaciones de la gente son mis preocupaciones, y cuando presida el Gobierno velaré por todo eso que les preocupa a los españoles”, ha añadido.

De este modo, Casado ha lamentado que España se encuentre “en manos” de un Gobierno que “llamó al rescate” a Otegi para pactar en el Congreso, “con los terroristas y sus herederos de Bildu”, decretos que no son urgentes. “Hemos visto cómo un Gobierno era capaz de negociar con proetarras con tal de convalidar unos Reales Decretos-Ley no urgentes ni de extraordinaria necesidad para permanecer una semana más en Moncloa”, ha indicado, y para ver después “cómo Otegi se regodeaba riéndose”.

A esta cuestión, ha indicado, se suman dos hechos igualmente graves: “Que Sánchez no haya dicho nada ni reprendido aún a Iceta por decir que en diez años el PSOE aceptaría una consulta sobre la independencia de Cataluña”; y, en segundo lugar, “que el PSE votara con Bildu una ley de abusos policiales en el Parlamento vasco después de que los amigos de Otegi llamaran nazis a la Guardia Civil y a la Policía”.

Esta última es otra “prueba” de que en España mandan Otegi, Torra, Puigdemont e Iglesias, de ahí que haya subrayado que las elecciones del 28A “van de tener a Iglesias de ministro del Interior, a Puigdemont diciendo lo que debe hacerse, a Otegi diciendo que manda mucho en el Gobierno y a Junqueras pactando en la cárcel los PGE”. “Esto no se puede sostener”, ha proclamado Casado, que ha lanzado los siguientes interrogantes: “¿Queremos a un PSOE que no es capaz de mirar a la cara de sus víctimas y explicarles por qué recibe los votos de Otegi? ¿Que no es capaz de poner orden en Cataluña y acabar con la farsa independentista?”.

“¿Queremos una España en la que manden Torra, Puigdemont, Otegi e Iglesias, en la que ya se reparten hasta los Ministerios?”, ha preguntado sobre el próximo 28 de abril, al tiempo que ha querido volver a lamentar que la Generalitat catalana de Torra, con quien Pedro Sánchez se sentó en Pedralbes a negociar 21 puntos, “esté pagando a una alimaña terrorista”, llamada Carlos Sastre, por dar cursos sobre la independencia a niños en los colegios catalanes.

“LA VALENTÍA DE EDURNE URIARTE”.-

Finalmente, Casado ha agradecido a Edurne Uriarte, número tres en la candidatura del PP al Congreso por Madrid y que ha intervenido en el mismo acto, por haberse sumado al equipo del PP “y por mantener su valentía”, ya que incluso cuando tenía que ir a dar clase escoltada, “nunca cejó en su empeño de defender los valores y los principios de libertad”.

DECÁLOGO PARA UNA EDUCACIÓN DE CALIDAD:

Garantizar la libertad de elección de las familias para elegir centro educativo

Evaluación pública y estatal, que sea vinculante en el Bachillerato. “Queremos saber cómo van nuestros hijos”

Garantizar que el castellano sea lengua vehicular. “Garantizar la enseñanza en castellano, no del castellano”, y que se utilicen las lenguas vehiculares, pero “nunca en detrimento de la lengua común”

Reforzar la alta inspección potenciando las competencias sancionadoras contra el adoctrinamiento. “Si se está adoctrinando, la inspección podrá denunciarlo y sancionarlo”.

Reforzar las asignaturas troncales, recuperar la Filosofía y apostar por la enseñanza de las nuevas tecnologías (STEM). “Se tiene que aprender la misma Lengua, Historia y Biología en todas las regiones”, recalca.

Apuesta por el bilingüismo en inglés para que los jóvenes salgan preparados para competir en cualquier país del mundo.

Defensa de la educación concertada, especial y en el entorno rural.

Prestigiar la profesión docente. Propone un “MIR educativo para seleccionar a los mejores profesores”.

Apuesta por prestigiar la FP dual, para la inserción laboral de jóvenes, que llegue también a la universidad, con empresas que participen en proyectos en la FP y que los continúen en la universidad.

Apuesta por la conciliación y por la maternidad. “Vamos a impulsar la gratuidad progresiva de la educación de 0 a 3 años” y a fomentar la conciliación, acabando con el presencialismo laboral.