El 'comando Rubalcaba' asalta La Vanguardia para lapidar a Chacón

"Mientras el primero presume de una dilatada experiencia política y parlamentaria, su adversaria muestra sin ambages su ambición (...). Mientras Rubalcaba exhibe entre sus haberes el triunfo sobre ETA, Chacón agita su condición de mujer. Mientras Rubalcaba pregona una voz única para los socialistas españoles, Chacón trata de esconder el hecho de pertenecer al PSC (...) Todo vale en esta lucha por el poder".

Por si no hubiera quedado suficientemente claro, el editorial de La Vanguardia concluye que aunque Rubalcaba y Chacón sean en muchos aspectos la misma cosa, tenían una diferencia:

"Lo que podría terminar de inclinar la balanza a favor de Rubalcaba es su inveterado pragmatismo frente a la aventura que supone, para muchos, la elección de Chacón".

ENRIC JULIANA: "CHACÓN YA SE LLAMA CARMEN"
No era sólo el editorial de Antich. También la columna de ese mismo día Enric Juliana, el director adjunto del periódico, estaba dedicada al congreso socialista, y - de nuevo - la peor parada era Chacón

"Chacón ya se llama Carmen los lunes, los miércoles y los viernes (en breve, todos los días de la semana) (...) Nadie conoce a Esquerra Republicana, todos abominan del tripartito (del primero y del segundo), y del Estatut, mejor no hablemos".

Juliana, también "refresca la memoria" a Chacón atizando a a su marido, Miguel Barroso. Para ello vuelve a sacar a la luz las frases de Zapatero en las que reconocía que su histórica frase ede que apoyaría sin condiciones el Estatut era de Barroso.

"Este verano, en unas jugosas confesiones al periodista Pedro J. Ramírez, director del diario El Mundo, José Luis Rodríguez Zapatero se sacaba las pulgas históricas de encima señalando a su ex asesor Miguel Barroso (compañero de Carmen Chacón) como autor de la famosa frase "apoyaré el Estatut que salga del Parlament de Catalunya". (...) Y ahora, Catalunya, si te he visto, no me acuerdo".

RAHOLA: "¿TÍTULO DE LA PELI DE CHACÓN? FALSAS APARIENCIAS"
Una de las columnistas más populares de La Vanguardia, Pilar Rahola, se unió también a la campaña

"Se abre el telón y sale una chica llamada Carme que se enfunda la bandera catalana y proclama su fe con el PSC. Después se abre el telón y aparece una chica llamada Carmen que se enfunda la bandera española, se presenta por Andalucía y se desmarca rotundamente del PSC. Después se abre el telón y aparece la chica llamada Carmen/Carme hablando en castellano/catalán, metiéndose en un lío con la bandera y militando en Nicaragua y en Ferraz a la vez. (...) ¿Título de la película?: Falsas apariencias".

PUIGVERD: PARA CHACÓN EL SOCIALISMO ES 'LO QUE LE CONVIENE' EN CADA MOMENTO
También el columnista de La Vanguardia, Antoni Puigverd, se une a la campaña y arremete igualmente y el mismo día 3 de febrero de 2012 contra Carme Chacón:

"Si ayer se exigía un nuevo Estatut, ahora se relativiza incluso el nombre: Carmen o Carme, qué más da. (...) ahora se relativiza incluso el nombre: Carmen o Carme, qué más da. (...) ahora lo bonito es que la candidata a dirigir el PSOE tenga orígenes andaluces. Interesa vencer. (...) Ayer color de ERC, hoy color andaluz. ¿Y mañana? El interés dirá. ¿Qué es el socialismo? Lo que me conviene, contesta Chacón esbozando una sonrisa triste".

TONI BOLAÑO CARGA CONTRA LA VANGUARDIA
La fuerte movilización del diario La Vanguardia fue respondida por el ex jefe de prensa del PSC, Toni Bolaño, partidario declarado de Carme Chacón, que participaba en un programa de Antena 3 TV en la mañana del 3 de febrero de 2012.

Bolaño calificó a El País de ser "el comando Rubalcaba" y a La Vanguardia de "el comando Rubalcaba de Cataluña". Y responsabilizó de la campaña al accionista mayoritario del periódico:

"El comando Rubalcaba de Cataluña está todos los días machacando a Chacón a sangre y fuego. Hoy todos los columnistas de La Vanguardia critican a Carmen Chacón a sangre y fuego. ¿Por qué? Porque ha cometido un error Carmen Chacón: decir que es española y catalana y esto en Cataluña... para el diario de un conde es ser demasiado español".

La referencia a "el diario de un conde" de Bolaño era un tiro dialéctico dirigido al accionista mayoritario de La Vanguardia de Barcelona, Javier Godó, que en la aristocracia española tiene el título de "Conde de Godó con grandeza de España".