Cooperativas Agro-alimentarias de Castilla-La Mancha baraja unas previsiones de cosecha para la campaña vitivinícola 2022/2023 de 19,5 millones de hectolitros de vino y mosto en la región, un 13% menos que los cosechados en la campaña del año anterior. Una merma en la cosecha que se produce a consecuencia de las altas temperaturas registradas en los últimos meses y a la escasez de precipitaciones.
Así lo han constatado los presidentes, gerentes y técnicos de las bodegas cooperativas de toda la región durante la tradicional Asamblea de Vinos de Cooperativas Agro-alimentarias de Castilla-La Mancha, celebrada este jueves en la sede del IRIAF de Tomelloso, para informar sobre las claves legislativas, productivas y comerciales de la próxima campaña vitivinícola.
La organización cooperativa, que representa más del 75% de la producción y transformación vitivinícola de la región, a las puertas de una vendimia inminente que va a comenzar con las variedades más tempranas (chardonnay, moscatel grano menudo, etc.), ha barajado unas previsiones de cosecha de 19-19,5 millones de hl de vino y mosto en Castilla-La Mancha y de 36-36,5 millones en España. El pasado año la región obtuvo una cosecha de 22,1 millones de hl de vino y mosto, según el Ministerio de Agricultura, y unos 22,68 millones de hl según datos del INFOVI, por lo que las previsiones arrojarían una disminución de tres millones de hectolitros menos, suponiendo un descenso del 13%, aproximadamente.
El portavoz sectorial de Cooperativas, Juan Fuente, ha reconocido que “si seguimos en condiciones climáticas parecidas a las actuales, con noches tropicales y altas temperaturas diurnas, se espera una cosecha que podría corregirse aún más a la baja”. Además, ha puntualizado que “la vendimia se va a anticipar y a los secanos se les va a hacer muy largo el final de ciclo debido al intenso estrés hídrico al que están siendo sometidos, con casi cuatro meses sin haberles caído una sola gota de lluvia y con temperaturas extremas”.
Previsiones en España y Europa
Cooperativas Agro-alimentarias de Castilla-La Mancha cifra las previsiones en el ámbito nacional en 36-36,5 millones de hl para esta vendimia, lo que supondría una campaña baja, respecto a los cinco últimos años; con una reducción de entre 3,5 y 4 millones de hl respecto a la campaña anterior, en torno al 10% menos.
En el contexto europeo, se estima que Francia volverá a una campaña que rondará la media, una vez superada la baja cosecha del año anterior por las heladas primaverales que sufrieron en mayor o menor medida todas las regiones vitivinícolas galas; y con Italia, que, a pesar de la sequía reinante, es muy previsible que mantenga su producción en niveles constantes. Todo ello, unido a la segura disminución de la producción en España y Portugal, configuraría una campaña productiva muy cercana a los 158,7 millones de hl que se obtuvieron el año anterior en la Unión Europea, es decir, 5 millones de hl menos que la media de los últimos cinco años.
“Se abre una gran oportunidad de aligerar existencias y normalizar las disponibilidades de cara a próximas campañas. Mantener mercados, aumentar márgenes y consolidar clientes mediante productos diferenciados y de calidad, serían las claves para atender este año los mercados vitivinícolas internacionales y obtener su reconocimiento”, ha comentado Fuente, quien también ha advertido que “siempre que se actúe con la moderación y la vocación de servicio y abastecimiento regular a nuestros clientes con los que habitualmente trabajamos”.
Y es que, desde Cooperativas han destacado que la clave en esta campaña será la elaboración de vinos de calidad con las uvas que se recepcionen con mayor equilibrio entre azúcar y acidez, llevando a mosto blanco tanto las uvas tintas y blancas que no completen su maduración o se desequilibren a su llegada a la bodega. Es por ello que “la elaboración de zumo de uva podría ser clave esta vendimia, producto que ha funcionado muy bien durante la pandemia, y que, debido a la escasez de fruta en Europa por las heladas primaverales, la uva puede tener una oportunidad única para cubrir este hueco”, ha puntualizado el portavoz cooperativo.
Existencias de vino
En relación con los stocks de vino en España a 31 de julio de 2022, éstos podrían rondar los 36 millones de hl de vino, de los que Castilla-La Mancha contribuiría con alrededor de 10, aparte de 1,20 millones de hl de mosto en la región. Unas cifras evaluadas por la Asamblea como muy razonables, ya que en el ámbito nacional supondrían casi 2 millones de hl menos de vino y mosto respecto a las existencias del año anterior.
Dichas cifras, a juicio del portavoz sectorial cooperativo “suponen un buen funcionamiento de las salidas, sobre todo en Castilla-La Mancha, desde donde se habría hecho un esfuerzo importante en aligerar existencias, tanto en exportación como en las diversas salidas en el mercado nacional, habiendo sacado más de 24 millones de hl de vino y mosto en toda la pasada campaña 2021/22”, es decir, a un ritmo de unos 2 millones de hl de vino y mosto al mes.
Novedades legislativas
La asamblea también ha analizado la próxima PAC para el período 2023-2027, en la que se mantendrán las mismas medidas y el mismo presupuesto en el sector vitivinícola durante dicho período. Se ha valorado de manera muy positiva la prórroga del régimen de autorizaciones de plantación de viñedo hasta, al menos, 2045 y se ha analizado con preocupación la aplicación y control de los eco-regímenes en el viñedo. Respecto a esto último, se concluyó que, si los sarmientos tras la poda no son triturados y enterrados para favorecer su mineralización rápida e incorporación al suelo vitícola, el eco-régimen en lugar de ser una práctica medioambientalmente sostenible se convertirá en un enorme problema sanitario en la vitivinicultura por el riesgo de propagación de hongos de la madera, enfermedad aún no resuelta a nivel mundial.
Además, se ha informado de los contenidos más destacados que la nueva Ley de la Viña y el Vino de Castilla-La Mancha contiene, valorándose de forma positiva y que seguro contribuirán a hacer un sector más moderno y sostenible, siempre que éste pueda competir en igualdad de condiciones con el resto de las regiones de España y de Europa.
Así mismo, se ha analizado con cierta tranquilidad que no se den las circunstancias para que se aumente el porcentaje de prestación vínica para su destino a alcohol a más del 10% debido a que las existencias y la producción de esta campaña serán muy moderadas. Sin embargo, desde Cooperativas Agro-alimentarias sigue sin entenderse la aplicación, únicamente en Castilla-La Mancha y por tercera campaña consecutiva, la limitación que se recoge en la orden 134/2022 que establece en 9 grados de alcohol en potencia mínimo en uva para la elaboración de vinos para esta campaña 2022/23, ya que se trata de una restricción que limita la competitividad de los vinos castellano-manchegos para abastecer ciertos mercados de vinos de baja graduación que tanto se demandan en la actualidad, respecto al resto de regiones vitivinícolas de España y del mundo.
Aplicación de la Ley de la Cadena
Por último, el director de Cooperativas Agro-alimentarias de Castilla-La Mancha, Juan Miguel del Real, ha explicado los requisitos que desde la presente campaña 2022/23 se exigirá a las bodegas cooperativas en su relación con sus socios proveedores “teniendo que establecer antes de que se realice la entrega de la uva, el procedimiento de determinación de su valor, el calendario de liquidación y que todo ello sea comunicado fehacientemente para conocimiento de sus socios propietarios”.