La Casa de la Cultura de Cabanillas ha vivido un intenso fin de semana musical este 28 y 29 de enero de 2023, con tres conciertos entre sábado y domingo, que se sumaban a la actuación de Ángel Stanich y Alice’s Cream del viernes por la tarde, dentro de las «Noches Acústicas», en este mismo escenario.
La celebración del II Festival de Música de Raíz «Cabanillas Folk» acercó a la localidad a dos magníficos grupos de música tradicional: los vascos «Korrontzi» en la tarde del sábado 28, y la formación de música celta «Mosquera Celtic Band» (procedente de Toledo, aunque con orígenes gallegos) en la tarde del domingo. Ambos conjuntos atrajeron muchísimo público a la Casa de la Cultura, en especial «Korrontzi», que rozó el lleno.
Korrontzi
El grupo vasco se presentó en Cabanillas con un magnífico cuarteto de instrumentistas. Se trata de una formación que liderea Agus Barandiaran, uno de los mejores músicos de trikitixa del País Vasco. La trikitixa es un acordeón diatónico, originario de Italia pero popularizado en Euskadi, y que es instrumento fundamental del folclore tradicional vasco, indispensable en las grandes fiestas populares (romerías, pasacalles, bailes populares, etcétera). Junto al acordeonista trikitilari Barandiarán, la formación se completaba con otros tres músicos (un percusionista, un intérprete de guitarras, mandolina y laúd, y un bajista-contrabajista), para un recital que combinó música instrumental con algunas canciones cantadas por el propio Barandarian, y que se redondeaba con la constante presencia de dos «dantzaris», jóvenes guipuzcoanas con muchísima energía, miembros del grupo «Oinkari Dantza Taldea».
El concierto de «Korrontzi» destacó por las constantes apelaciones al público, que se mostró muy receptivo, y no paró de bailar y dar palmas durante toda la actuación. Por su parte, Agus Barandiaran hizo constantes explicaciones de las raíces de su música, la historia de su instrumento, prohibido durante años de dictadura, y evocaciones a los grandes maestros de esta especialidad.
Mosquera Celtic Band
Ya en la tarde del domingo el «II Cabanillas Folk» se cerraba con la formación «Mosquera Celtic Band», un grupo liderado por el gaitero Fernando Mosquera (toledano de nacimiento, pero de orígenes familiares gallegos), y que se completa con otros cinco grandes músicos: la cantante Sara Calatrava; el violinista Manuel Briega; el guitarrista Rafael Martínez-Campos; y dos percursionistas: José Alberto Ortiz a la batería; y Manuel Aguado a los panderos y otros elementos de percusión tradicional.
Música de orígenes escoceses, irlandeses y gallegos, con algunos toques de folclore norteamericano, es la apuesta de esta formación toledana, en la que destaca el inmenso repertorio de instrumentos que utiliza el líder de la formación: gaita gallega, gaita escocesa, gaita irlandesa, y multitud de flautas de diferentes tamaños y procedencias. La banda tiene una trayectoria de 11 años en los escenarios, con tres discos en el mercado, y uno a punto de salir en los próximos meses. Una selección de los temas de todos ellos fue la propuesta de Mosquera para su actuación en Cabanillas, una localidad que aseguró ya conocer y haber visitado anteriormente.
Contrabandeando
El fin de semana musical se completó en la matinal del domingo con el inicio de la cuarta edición del ciclo de conciertos didácticos «Más música, por favor», que en su primer concierto de este año trajo al escenario de la Casa de la Cultura al grupo «Contrabandeando», una formación de Alcalá (en la que hay presencia de un percusionista cabanillero como es Alvar Grijelmo, profesor en la Escuela Municipal de Música), y que realizó un formidable despliegue de músicas de todo el continente sudamericano, desde la Patagonia a La Habana.
Sobre el escenario, nueve magníficos músicos, de distintas procedencias y generaciones. Las hermanas Aurora y Elvira Padrino como extraordinarias cantantes; el trompetista Dani Felipe y el saxofonista Jesús Serrano en los vientos metal; los percusionistas Javi Jiménez, Antonio Algar y el citado Alvar Grijelmo; el bajista y contrabajista Alejandro Martín, y liderando la formación el cantante y guitarrista César Gallego.
El público, muy numeroso, se volcó con el grupo, y no paró de corear, bailar y dar palmas durante la hora y media de actuación.