De sobra es conocido que la prostitución ha sido utilizada a lo largo de la historia como una técnica de espionaje, ya que las personas involucradas en ella tienen acceso a una información valiosa.
Con un estilo directo no exento de humor y sobre todo periodístico, Joaquín Abad, el autor de este libro de 156 páginas, desvela la humilde aportación de la España de 1949 a 1954 al espionaje internacional.
En una España de postguerra con todavía cartillas de racionamiento, el autor cuenta los pormenores de cómo se fraguó el suministro regular y a precio barato del petróleo procedente de Irán, del famoso Sha de Persia, para la refinería de Puertollano.
Para España, poder disponer de petróleo de forma permanente y a precio más que barato, era fundamental para poder superar las miserias y desastres que provocó la Guerra Civil.
Franco consciente de la importancia vital de este contrato para el bienestar de su país, puso a sus mejores hombres…y mujeres manos a la obra. Y para ello, se valió de varias señoras de postín y de artistas (bailaoras y cantantes) para “atender debidamente” a las autoridades extranjeras, agasajándoles con lo mejor de nuestra piel de toro : excelentes restaurantes (Lhardy, Casa Botín y Casa Ciriaco, entre otros) y las mejores fiestas con artistas y bailaoras de la época (hay que leer el libro para ponerles nombres, no voy a hacer ahora un “spoiler”).
Como España no solo no se había puesto del lado de los Aliados en la Segunda Guerra mundial si no que además Franco envió la llamada División Azul a luchar al frente oriental bajo el mando alemán, los americanos decidieron que la ingente cantidad de millones de dólares que Estados Unidos tenía para Europa en forma de Plan Marshall, iban a ir a Europa, no a España, por lo que España se moría literalmente de hambre, comiendo en el mejor de los casos, algunos granos de trigo que mandaba la Argentina de Perón.
Pero como la España de Franco era un bastión contra el comunismo, los americanos quisieron ganarse el apoyo y la confianza del gobierno español, mediante el establecimiento de unas bases militares. Una de ellas, en Torrejón.
Y de nuevo Franco, para conseguir ese importantísimo apoyo extranjero, tiró de lo mejor que tenía en esa época : Restaurantes, fiestas y…putas (artistas, actrices, marquesas y bailaoras que “por España” no les importaba solucionar esos asuntos de bragueta y de paso, ganarse unas pesetas y asegurarse unos contratos de las empresas cinematográficas de la época). Y por lo que se ve, la cosa… funcionó.
Y según pormenoriza el autor, de esta forma, se fue constituyendo una red de Palacetes (en realidad, burdeles) al servicio del Estado para “cumplimentar debidamente” a los diplomáticos extranjeros y de paso, filmarles con un sistema que habían dejado los rusos cuando tuvieron que dejar precipitadamente Madrid, y que los encargados del Servicio de Información de Franco supieron sacarle bastante partido…
Déjese llevar por la narrativa y el estilo ágil y periodístico de Joaquín Abad, y cuando termine el libro, además de pasar un rato divertido, se dará cuenta de por qué el autor al principio del libro dice que “es una novela de ficción” con muchos nombres supuestos…por razones obvias.
Sobre el autor.-
Joaquín Abad es periodista, editor y director del periódico mil21. Columnista en multitud de medios de comunicación, fue director del diario La Crónica de Almería durante 17 años desde 1982, donde salvó la vida tras varios atentados de la mafia local que ordenó su muerte, un relato recogido en su exitoso libro Descubriendo a Juan Asensio.
Trabajó en las redacciones de Arriba, El Alcázar, Diario de Avisos, Personas, o la agencia Pyresa. Uno de sus trabajos más reconocidos fue como director del mítico semanario de sucesos El Caso, del que sigue siendo editor y es CEO de la compañía Cibeles Group.
Ha publicado con gran éxito distintos libros de investigación y denuncia como El andorrano, Andorra Connection o Descubriendo a Juan Carlos I, siendo el primero de ellos el libro más vendido de la historia del Co-Principado, con más de 10 ediciones y versiones en varios idiomas.