El digital El Debate inicia el año con su récord histórico de audiencia

La revelación periodística más importante de los últimos días ha sido la actuación del juez Aguirre contra Puigdemont, al que ha señalado como posible autor de un delito de «traición» por sus conversaciones con emisarios de Putin durante el golpe separatista de 2017. El auto del magistrado provocó un seísmo político, pues llevó a Junts a rechazar la ley de amnistía que había preparado con el Gobierno. ¿Y qué periódico adelantó el auto del juez Aguirre? El Debate, en una primicia de Alejandro Entrambasaguas.

El caso anterior es uno de los muchos ejemplos de la apuesta de nuestro diario por la información exclusiva, hasta el extremo de que nos hemos convertido en uno de los periódicos que aportan más noticias propias relevantes. Ese pulso periodístico, unido a la sección de Opinión más leída del país y una línea editorial clara y estable, han hecho posible que en poco más de dos años El Debate haya firmado el despegue más rápido de un periódico digital en España. Este éxito se ha logrado además sin agregar a la oferta portales de materias no periodísticas, como videojuegos.

El Debate ha iniciado el año con muy buen pulso. En enero de 2024 ha conseguido un nuevo récord de audiencia, con 12,4 millones de lectores mensuales. Además, la media diaria se ha disparado y ya ronda el millón de visitas diarias, cuando en el día de debut, el 1 de octubre de 2021, el periódico obtuvo 55.000. Ese salto da fe de un crecimiento insólito.

El Debate está inmerso además en un proceso de expansión territorial. El mes pasado ha presentado su edición en Galicia, que se une a las de la Comunidad Valenciana y Madrid, ya en marcha, con Andalucía y Cataluña en el horizonte inmediato. También se sigue reforzando la oferta informativa, con la incorporación de firmas como las de Juan Carlos Girauta, Andrés Amorós y Mariona Gúmpert.

El éxito de El Debate, periódico editado por la ACdP que preside Alfonso Bullón de Mendoza y dirige Bieito Rubido, estriba en gran medida en que ha venido a cubrir un espacio editorial que estaba desatendido, pues propugna los valores de la doctrina social de la Iglesia y un ideario que defiende la unidad de España, el orden constitucional y el valor de la historia, lengua y cultura españolas.