Coco Chanel, la historia de una mujer

Su apasionante vida estuvo llena de avatares, amantes y desencuentros. Al morir su madre, siendo Gabrielle muy pequeña, su padre la abandonó en un hospicio, donde fue educada por las monjas, algo que ella siempre intentó ocultar. Existen varias versiones del origen del apodo Coco, pero parece ser que la que más se aproxima a la realidad es la que cuenta que, cuando era jovencita, quería ser cantante y comenzó a hacer sus pinitos, con una canción de cabaret que se llamaba Kokorico, como en el estribillo se repetía varias veces la palabra Coco, el público acabó por llamarla “la petite Coco” y con Coco, se quedó.

El autor, Axel Madsen, conversó con muchas personas que conocieron de verdad a Chanel, principalmente su abogado durante más de 40 años, su fotógrafo desde la década de los cuarenta y la periodista y prometida de Saint Exuspery, Louise de Vilmorin, quien conversó varias tardes con Mademoiselle Chanel con el propósito de hacer la biografía definitiva de la principal diseñadora de moda del siglo XX.

El libro es un recorrido por los detalles más significativos de la vida de esta extraordinaria mujer, que no dejó indiferente a nadie. A través de sus 377 páginas, se nos muestra una mujer vanguardista, luchadora, rompedora, trabajadora impenitente y, ante todo, única en su género.

La lectura del libro está continuamente salpicada de perlas y frases que definen certeramente a Madmoiselle Chanel. Sostenía que la edad de la mujer no significaba nada, “se puede ser maravillosa a los veinte, encantadora a los cuarenta e irresistible el resto de la vida”. También decía que la mujer de veinte años tenía la cara que le había dado la naturaleza, la de treinta la que le había moldeado la vida y la de cincuenta la que se merecía.

Chanel odiaba los corsés y las estrecheces, tan de moda en su época. Al mismo tiempo, creía firmemente que la elegancia en la ropa significaba “libertad al moverse”, y esa fue la premisa de sus diseños. Creó muchos clásicos de moda, entre los que destacan, entre otros, el traje chaqueta, el bolso con cadenita para colgarlo al hombro y los zapatos de dos colores con el talón descubierto.

Entre sus clientes habituales estaban famosos de los 50 como Brigitte Bardot, Marlene
Dietrich, Katherine Hepburn, Jackie Kennedy que inmortalizó el vestido Chanel rosa y negro, Grace Kelly y Marilyn Monroe, a quien debe la duplicación de la venta de sus colecciones, después de que ésta se atreviera a decir que para dormir sólo se ponía unas gotas del perfume Chanel número 5.

Pero no sólo creó moda, sino que impuso tendencias, tales como los trajes de chaqueta, las camisas blancas de líneas rectas, el pelo corto, los jerséis masculinos adaptados a la mujer y la ropa sport ya que era gran aficionada a la equitación.

Fue única y extraordinaria hasta para morirse. El 10 de enero de 1971, Madmoiselle Chanel estaba en la cama, se encontraba fatigada y presagiaba su fatal desenlace. Su criada, Céline, fue a buscar al médico, pero como era de noche y domingo, tardó bastante en aparecer. Se mantuvo lúcida hasta el último momento. Sus últimas palabras fueron: “Mira, así se muere”. Y Céline le cerró los ojos.◆

TítUlo: COCO CHANEL
Autor: AXEL MADSEN
Editorial: CIRCE

Texto: Lord Charles Albert