Del incremento del salario mínimo interprofesional a los trabajadores, casi la mitad se destina a cotizaciones sociales e impuestos sobre la renta, lo que resulta en una recaudación significativa para el Estado, por lo que solicitan al Gobierno de España que rectifique y exima del pago del IRPF la subida del SMI y que ponga fin a la "voracidad recaudatoria".